lunes, 23 de abril de 2012

Lover Book


"-No te ofendas, pero a veces, una se siente mas libre de hablarle a un extraño que a la gente que conoce, ¿Porqué será?
-Probablemente porque un extraño nos ve como somos y no como quiere creer que somos."



Escucha el silencio, verás como habla.




FELIZ DIA DEL LIBRO!


viernes, 20 de abril de 2012

Critica a LIVING THINGS

Coloco esta critica al nuevo disco de Linkin Park hecha por "The hundreds" porque me ha encantado.


Puede algo mainstream ser una pasada? Esa es una pregunta a la que nos vemos forzados a responder en ‘The Hundreds‘. A pesar de que todavía no estamos cerca de ser una marca mainstream, seguimos creciendo y floreciendo, y algún día nos encontraremos en esa encrucijada. Así que, ¿puedes ser mainstream y una pasada?

En pocas palabras, la respuesta es Sí. Aunque lo de “atractivo” es subjetivo, creo que la mayor parte de la gente estaría de acuerdo que las grandes marcas como Apple, Nike o Kanye West, en sentido general, son una pasada.

Es difícil para mi compaginar eso con la filosofía que he mantenido durante toda mi vida, la que defiende que algo que es una pasada es producto de la exclusividad, la rareza, y lo underground. Como algunos han bautizado en algunas subculturas, hacerse mainstream es perder. Mantén la esencia, mantente en la pobreza. Ese es el mantra.
Cuando era tan sólo un adolescente de la escena punk en el Sur de California durante los 90, con mis Dickies y Converse, un grupo como Linkin Park representaba todo con lo que yo estaba en contra. Este grupo no me representa, no podían hablarle a mis sensibilidades de victimismo; a mi modo de ver, ellos se bañaban en lo mainstream, y nadaban en lo actual. Tan pronto como una banda entraba en el “Furious 5 at 9″ en KROQ (el top 5 de canciones del día en la cadena de radio alternativa de Los Ángeles), eran descartados como mis enemigos. Y un grupo como Linkin Park, quizás la banda de rock más popular de nuestra generación, no podrían salir de ese top aunque pagaran por ello.

Mike Shinoda tuvo que vivir con ello. Como cabeza visible de Linkin Park, ha tenido que capear a detractores y parodias, así como a los asesinatos en forma de críticas. Pero al mismo tiempo, también ha sido recibido con la dedicación de millones de fieles seguidores en todo el mundo, se ha creado una exitosa carrera musical, se ha mantenido en el tiempo, y han abierto el camino a una gran ola de grupos que les han seguido. Creo que eso es una pasada. Una verdadera pasada.
Mientras estoy sentado con Mike en el estudio de grabación donde Linkin Park ha confeccionado su nuevo disco, LIVING THINGS, no sólo mis oídos están abiertos a la música, también lo están mis ojos. Veo los instrumentos que han sangrado para crear este disco, las noches sin dormir como manchas a lo largo de las teclas del piano y las cuerdas de guitarra, veo las garabateadas hojas con letras abiertas en los soportes. Mientras hablamos sobre el disco, empiezo a entender no sólo todo lo que este grupo ha hecho, también lo que están haciendo. Pregunta a cualquier treintañero sobre Linkin Park, y los barrerán hacia un abismo de rap y rock. Pero pregunta a un adolescente sobre quién es Linkin Park, y te cantanran una melodía diferente.

Literal. Cantarán una nueva canción, que no suena familiar, quizás irreconocible para cualquiera que conozcas. Porque mientras el resto de sus colegas se fundieron en la oscuridad, Linkin Park nunca pararon de evolucionar y crear nueva música. Si, su disco debut de rap-rock en 2000 Hybrid Theory, alcanzó el diamante, pero han hecho 4 discos muy contrastados en términos artísticos desde entonces, y han vendido 50 millones de discos y ganado un par de Grammys. Eso es una pasada.
LIVING THINGS debuta el 26 de junio. Es de lejos el trabajo más exhaustivo, sorprendente desde su inicio con un sonido familiar a Linkin Park, con sonido fuerte de rap y rock de antaño. Los primeros dos temas son como viejos amigos para los críticos y seguidores de Linkin Park, reunidos de nuevo después de que el grupo buscara y experimentara con la vanguardia. Mi disco favorito de Linkin Park fue el último, A Thousand Suns, porque lo podías escuchar igual que lees un libro. Estaba hecho con cabeza y a conciencia, era una historia emocional que tenía peso.

No me entendáis mal, LIVING THINGS no abandona esa faceta. En el tercer tema, te ves empujado a un territorio desconocido. La música crece en intensidad, tiene un toque exótico, teñida con un poco de todo. Linkin Park, como deberíais saber, en sus inicios se llamaba Hybrid Theory (como su disco debut) porque su meta era fusionar y mezclar las cosas que les apasionaban – no sólo géneros musicales, también elementos artísiticos, étnicos y culturales. Este disco vuelve a esa filosofía, es un “cuerno de la abundancia” musical: lineas duras de bajos con beats de fondo que recuerdan al dubstep, las voces de otro mundo de Chester Bennington sobre guitarras castigadoras.
LIVING THINGS es un medidor preciso de dónde se encuentra Linkin Park ahora mismo en su carrera. La mayoría, si no todas, de las bandas de rock nunca llegan tan lejos, especialmente en este clima de música bostezante de Bon Iver y rap de lloricas. Además, todos estos egos y personalidades, en la carretera, actuando, escribiendo juntos, durante más de una década y media. Pensad sobre ello, ¿cuantas estrellas de radio de la mitad de los 90 están todavía en lo más alto? Eso es una pasada.

Sigo a Mike un par de millas hacia los estudios donde LIVING THINGS está siendo mezclado. El guitarra principal Brad Delson está en la parte trasera, hablamos sobre trabajo, pero hablamos más sobre nuestras vidas.
Entonces me presentan a Manny, el mezclador. Aunque Manny El Mezclador pueda sonar a dibujo animado, lo que este tipo hace es cualquier cosa menos un juego de niños. Dos décadas en el mundo de la música, ganó sus galones durante la era del rap de la Costa Oeste de los 90, y como prueba tiene horroras historias “Detrás de la Música”. Acaba de terminar de mezclar el nuevo single de Bieber, y está trabajando duro en el nuevo disco de John Mayer. Lo hace lo mejor que puede para explicarme la ciencia del mezclado, pero es lenguaje extraterrestre para mí. Estoy superado por el mar de interruptores y de tentáculos de cable. Pero al fin y al cabo, entiendo lo que hace falta para hacer estos discos. Casi puedo descubrir lo que Linkin Park hace para alcanzar su creación. No es arte por el cual puedes pagar para descargarte, procesar con un filtro, retwittear, o aprender a través de algún tutorial en Youtube. Para hacer un disco potente que comunique una historia y una misión, que hable a legiones de seguidores,… necesita cerebros, necesita corazón, y necesita puños.
Y eso sin duda es una pasada.


domingo, 15 de abril de 2012


Cotilleando mi propio blog, yo que no tengo otra que hacer como terminarme el libro que estoy leyendo, estudiar o hacer algo útil vamos..el caso es que he descubierto que en algunas entradas tenia algunos comentarios, y mi sorpresa ha sido "oooh :O ! "
Y luego he dicho "pensarán que soy una borde que no digo ni mu"
No no, es que soy un empanada!
El caso es que en mi cabeza tengo una especie de chip que piensa que aqui solo entro yo a poner mis ralladas y se va y que por aqui no pasa ni el viento.
Ya veo que no.
Pido disculpas a esa gente que dejó comentarios en su momento y yo ignoré en mi bendita ignorancia.
En fin, un aplauso a toda esa gente que en algun momento se tropieza con este blog y dedica unos minutos de su tiempo para ver mis tonterias ^^


Monday is almost here.
Early Monday morning, our new single BURN IT DOWN will be released.  The LIVING THINGS album pre-sale will begin.  You’ll see the album cover, the track listing, and hear about some new tour plans.  My bandmates and I are very excited for this week.
Many of you know our story up until this point.  We built the band upon the idea of fusing all our favorite styles of music–as different as they might be–into one, signature sound.  Our first two albums were the result of a lot of hard work, perseverance, smarts, and luck, to build a toolbox that would provide us with what we needed to make the best songs we could at the time.
Success came at a pivotal time in an industry that was about to take a nosedive, and we were able to establish ourselves before things changed drastically.  Hybrid Theory became the best-selling album of the year, worldwide.  After Meteora‘s success, we realized that we needed to step back and think about our future, in order to have one.  We decided we had to had to veer away from the main thing upon which our success was built: the music.
When I tried to explain this pivotal moment to a friend of mine, he had a hard time understanding.  He said, “It’s like you invented the Big Mac or the iPod, then decided not to sell it anymore.  Why the hell would you do that?”
Trying to explain how personal and artistic choices factor in for a band like ours is difficult.  As we finished up “A Thousand Suns” in 2010, I found myself having to try to do it often, in interviews and to myself.  Before we even finished the songs, each guy in my band knew it was a polarizing and challenging album, one that people would probably love or hate.  I suppose that it didn’t really matter if it made sense to anyone but us — for a while, we had to steer as far away from the early sound of Linkin Park as possible, or else we would be trapped making the exact same music over and over until we had to call it quits.
Thinking back: as we wrote Minutes To Midnight and A Thousand Suns, I would sometimes bring in demos that sounded like something from the first two albums.  Those demos were always met with a negative reaction by my bandmates, and I tended to agree.  I loved the journey toward a new, unknown sound.  With each experiment, we discovered new ways to make songs, and we filled our toolbox with tons of new tools.  With each song, we tried both cutting-edge and classic gear; we started with radically different seeds; and we approached the vocals with a virtual blindfold on.  And, about a year ago, I realized that our toolbox was virtually overflowing with great tools.
But we were avoiding something.
In the early part of our career, we were inexperienced.  We made decisions on all fronts that some of us regret (some times a little, some times a lot).  And some decisions (like my fire-engine red hair back in the day) were things that I don’t really regret, but I simply wouldn’t do today.  All those things spun together to create a complicated uneasiness about the past that the band wasn’t able to come to terms with for a while.
Luckily, I wasn’t the only one who felt that way.  Over the course of the last year, the subject kept popping up, and we talked about how to tastefully bridge the gap between all the musical places we’ve been, to marry together all the ideas we’ve accumulated about how to make a song.  And as LIVING THINGS began taking shape, the most powerful shift I saw take place was the acceptance and eagerness to use all the tools in the toolbox, not just some.  Everything at once, together.
Some people have already compared our new album to the early ones.  I suppose it depends on how you want to make that comparison (by the way, it’s certainly not about guitars).  For me, it’s all about getting back to the real “hybrid theory” — not the album with that name, but the idea that the six guys in our band have drastically different tastes in music, and the blending of all those sounds into one is exactly what we built our band upon.


Palabras sabias, no puedo esperar a mañana!

lunes, 2 de abril de 2012


La Semana Santa ha comenzado.
14 días Burn It Down
53 días Rock in Rio
Pesas, caramelos, amigos..
Todo lo que tengo me hace feliz.